Lo sé. Suena fácil. Pero si estás leyendo esto, probablemente te importa tu piel lo suficiente como para cuestionarte pequeños hábitos. Y déjame decirte: este es uno de los cambios más simples y subestimados que puedes hacer por tu rostro.
🧖♀️ Empecemos con lo básico: ¿Qué pasa cuando usas la misma toalla para todo?
Después de bañarte, tu toalla corporal absorbe mucho más que solo agua:
● Células muertas
● Sudor
● Residuos de desodorante, cremas o aceites corporales
● Bacterias que habitan en zonas como las axilas, pies o incluso el cuello
Ahora imagina frotar todo eso en tu rostro… sí, ese mismo rostro al que le aplicas sérums carísimos y limpias con delicadeza todos los días.
Tu piel facial es más delgada, más delicada y mucho más propensa a desarrollar imperfecciones, sensibilidad o textura. Así que no, no merece la misma toalla que tu espalda o tus pies.
😬 ¿Y si sigo usando la misma toalla?
Si bien no es una tragedia inmediata, podrías estar contribuyendo (sin darte cuenta) a varios problemas de piel como:
● Brotes o espinillas que aparecen “de la nada”
● Irritación o picazón constante
● Enrojecimiento o piel con textura
● Pérdida de luminosidad y glow natural
Y lo peor es que solemos culpar al clima, a la alimentación o al skincare… sin pensar que quizá la culpa es de esa toalla que llevamos usando para todo.
🧼 Entonces, ¿cuál es la alternativa?
La solución es tan simple como efectiva:
Empieza a usar una toalla pequeña, limpia y exclusiva solo para tu rostro.
Idealmente que sea:
✔️ De algodón suave o microfibra
✔️ De uso facial exclusivo (nunca corporal)
✔️ Lavada al menos cada 3 usos
✔️ Guardada en un lugar limpio y seco
¿Un plus? Usa colores claros para notar fácilmente si ya necesita lavado. Y si puedes, ten más de una para ir rotando.
🌸 El skincare empieza por hábitos, no por marcas
Puedes tener el suero más viral de TikTok o una rutina de 7 pasos… pero si cada día le pasas bacterias a tu cara sin saberlo, estás retrocediendo más de lo que avanzas.
Así que hoy te dejo este recordatorio:
Empieza por lo básico. Separa tu toalla corporal de la facial.
Tu piel lo va a notar. Y te lo va a agradecer.