Mejor conocida como “piel de gallina” por su parecido a cuando nos dan escalofríos, la queratosis pilar es una afección muy común e inofensiva.
Se trata de esas protuberancias o granitos ásperos y rojizos que aparecen en brazos, muslos, glúteos y mejillas debido a que la piel produce demasiada queratina obstruyendo los folículos pilosos (o sea, los poros donde salen los vellitos). Por lo general, estos granitos no causan comezón ni ninguna otra molestia.
Además de la genética, los cambios hormonales e incluso la obesidad o no hidratar correctamente la zona, hace que ésta persista. Puede aparecer a cualquier edad, pero es más común en niños y adolescentes, y usualmente desaparece entre los 20 y 30 años.
La queratosis pilar no tiene cura como tal, pero existen algunas formas de tratarla o prevenir que empeore. Algunos ingredientes comunes dentro de los tratamientos humectantes son la urea, el ácido salicílico y el ácido láctico, que juntos ayudan a disolver el tapón de queratina al mismo tiempo que suavizan la piel seca.
Solo no olvides consultar primero con un dermatólogo antes de utilizar cualquier producto para prevenir efectos negativos como irritación o comezón.
Por último, te recomendamos no bañarte con agua caliente y no frotar con fuerza la zona al limpiar y al secar la piel, así como hidratarla después. Aquí te compartimos algunos productos que podrían ayudarte a tratarla: