Si tienes piel sensible, sabes que ciertos hábitos pueden empeorar su estado. Desde productos hasta técnicas que parecen inofensivas, es fácil caer en algunos errores que agravan la sensibilidad.
1. Usar productos con fragancia
Las fragancias, aunque pueden parecer agradables, son una de las principales causas de irritación en la piel sensible. Sus ingredientes suelen ser muy agresivos, por lo que lo ideal es optar por productos etiquetados como “sin fragancia” para reducir el riesgo de reacciones adversas.
2. Exfoliar en exceso
La exfoliación ayuda a renovar la piel, pero en pieles sensibles, el exceso puede ser un gran enemigo. Exfoliar más de una vez por semana, o usar exfoliantes demasiado fuertes, puede dañar la barrera de la piel, provocando irritación y enrojecimiento. Opta por exfoliantes suaves y no te excedas con su frecuencia.
3. No hidratar lo suficiente
A veces, al pensar que la piel se ve “normal”, creemos que no necesita hidratación extra. Sin embargo, una piel bien hidratada es más resistente a los factores externos que pueden irritarla. Utilice una crema hidratante ligera y libre de aceites para asegurar que la piel esté siempre protegida y equilibrada.
4. Usar agua muy caliente al lavar el rostro
El agua caliente puede eliminar los aceites naturales de la piel, dejando la barrera protectora más débil y propensa a irritaciones.
5. Cambia de productos constantemente
Si eres de las que adora probar nuevos productos, ¡ojo! Cambiar de productos con frecuencia no permite que la piel se acostumbre a las formulaciones, lo cual puede causar irritación. Si encuentras una rutina que funciona bien, mantente con ella y prueba nuevos productos poco a poco y uno a la vez.
6. Saltarte la protección solar
La piel sensible es más vulnerable a los rayos UV, así que la protección solar es un paso que nunca debe faltar. Utiliza un protector solar mineral, con SPF 30 o superior, para una protección suave y eficaz.
7. Usar toallas ásperas o friccionar la piel al secarla
Secar el rostro o el cuerpo frotando con una toalla puede irritar y enrojecer la piel sensible. En su lugar, opte por toallas suaves y sécate dando pequeños toques.
