Siempre que practiquemos deportes al aire libre o simplemente salgamos de paseo, es importante proteger la piel del rostro y del cuerpo, y no solo en verano que vamos a la playa, sino todo el año, aunque únicamente vayamos a la oficina o nos quedemos en casa.
Para empezar, si sabemos que estaremos expuestos al sol por varias horas, hay que usar ropa adecuada, de preferencia pantalón y manga larga, además lo ideal es que esta favorezca la transpiración y seque rápidamente. También hay que considerar el uso de gorras y lentes para el sol.
De ser posible evita exponerte al sol de las 12 a las 16 horas, que es cuando la radiación solar es más fuerte y dañina para la piel.
Y el punto más importante: el protector solar que hay que aplicar 30 minutos antes de salir y reaplicarlo cada 2 horas o cada hora en caso de mojarte. El protector solar que uses debe cumplir ciertas características:
- Tener una alta protección contra rayos UV y luz azul (o sea, protección de amplio espectro)
- De preferencia, debe tener una textura ligera y de rápida absorción
- Formato fácil de llevar y de aplicar
- Muy importante: que sea resistente al agua y al sudor
Hay que considerar que el protector, además de aplicarlo en rostro, brazos, piernas y espalda, hay que aplicarlo también en cuello, escote, orejas, manos, pies si están expuestos e incluso la cabeza en caso de no tener cabello. En el caso de los labios, existen bálsamos labiales con FPS que además de protegerte te humectarán.
Haz lo que te gusta siempre protegiendo tu piel. 😉
